“Existe cierta parte del amor por el arte que nace con la persona, del mismo modo que otra parte se puede trabajar” afirma el filántropo colombiano.

Que el empresario y filántropo colombiano, Carlos Mattos, es un amante del arte no es ningún secreto. Pero de dónde le viene semejante inspiración y amor por esta faceta, sí que lo puede ser.

Seguimos conociendo un poco más a Mattos gracias a una extensa entrevista que realizó un pequeño e informal medio español al empresario. 

Mattos afirmaba que hay una parte “innata” que nace con la persona en relación al arte: “Yo creo que hay una parte que nace con la persona” explicaba, para continuar “luego existe otra que con el tiempo tienes la oportunidad de ir puliendo”. Si bien es cierto que el amor por el arte es algo complejo, para Mattos depende de la “personalidad”. El propio empresario comentaba que el “diferenciar una obra de otra” es parte de la personalidad y no tanto de lo que uno haya visto o escuchado. 

En ese repaso a su vida, el filántropo colombiano aseguraba que siempre tuvo “gusto por el arte”. “Siempre, desde pequeño, me interesé por el arte. Por decirlo de alguna manera, siempre estuve encaminado hacia él -el arte-”. 

El foco en el arte de su país de origen no pasó desapercibido en la entrevista al medio español: “En Colombia siempre hubo artistas de mucho renombre como los pintores Enrique Grau o Fernando Botero” argumentaba Mattos, para proseguir admirando al propio Grau: “Yo siempre quise ser amigo de Grau y, efectivamente, lo fui hasta su muerte”.

En otro apartado Mattos explicaba que, para valorar el arte es necesario “conocer mundo” además de “ver otras culturas”. En palabras del empresario: “Yo he podido viajar mucho y he tenido la oportunidad de diferenciar una cultura de otra, en definitiva, un arte de otro”. Y es que no esconde su admiración hacia estas “sobresalientes personas” que se dedicaron a exteriorizar su particular visión de entender el mundo.

De cara al futuro, Mattos avanzaba que está “pendiente” de crear una fundación para colaborar en lo “que pueda” tanto en Colombia como en España. “Quiero hacer una gran fundación donde se pueda exponer todo el trabajo de estos genios” comentaba Mattos, quien seguía “Tenemos muchas cosas guardadas y que no mostramos y yo me veo en la obligación de hacerlo”. 

Para finalizar, Mattos reconocía que una de sus grandes metas es la creación de esa fundación -a la que denomina su particular ‘obra de arte’- y valoraba la necesidad de aportar “mi granito de arena en lo poco o mucho que uno pueda tener”.